Lo que haga llorar al depresivo, hará reír al payaso

 Acabo de voler a ver "Melinda-Melinda" de Woody Allen y me recordó que todo el mundo habla del problema del artista ante la falta de inspiración y nadie nunca del problema del artista de volver carismáticamente deleitable lo que sea porque domina el oficio.

Les copio un mail que acabo de mandar a un escritor que admiro y me admira:
Acabo de volver a ver la película de Woody que se propone mostrar los mismos hechos primero como drama y después como comedia como para demostrar que todo depende de la actitud que adoptemos para entramar nuestro autonarrativismo.
Es sorprendentemente pésima.
Toda la admiración que se podría tener del estilo-qué fantástico este hombre que sigue como una cantera indetenible de creatividad-se va al piso cuando uno advierte que la versión dramática difiere tantísimo de la cómica. La Melinda trágica no puede ver a sus hijos por una resolución judicial después de haber engañado a sus hijos. Lo lógico sería que hubiera connotación positiva ceteris paribus pero en la versión alegre ¡ni tiene hijos!
Recuerdo que conversamos acerca de este tema y me dijiste algo así como que la idea era excelente y la realización algo decepcionante.
Realmente la idea de que los mismísimos hechos puedan ser presentados como tragedia y como comedia es una idea magnífica.
Woody no presenta los mismos hechos, más allá de que la parte cómica no es graciosa y la parte trágica no es desgarradora.
Da bronca ver esta película porque Woody es tan talentoso que saca adelante cosas que si esto no se tratase de arte, sino de una corporación desalmada pragmática y utilitarista, no sacaría. No es posible que de Woody emane una oración que no tenga algo de encanto y eso es OTRO problema del arte del que nadie se ha ocupado. La seducción improcedente y que no lleva a ninguna parte. Los talentosos no sufren solamente de falta de inspiración: sufren de talento suficiente como para hacer cualquier basura interesante. Lo inconducente se carga de onda.
Hay un nicho de mercado, un terreno virgen, un lugar inexplorado que merece ser ocupado por una obra rigurosamente respetuosa del fair play. Simplemente una tragedia que tal cual se le presenta al público y la hace llorar en la segunda manera de exponer sea desopilante pero sin dejar de ser la misma. No entiendo qué dificultad puede representar, dado que la comedia es únicamente el modo de configurar la información.
A mi juicio no hay nada de lo que uno no pueda reírse, si logra mostrar el costado absurdo-a mi juicio no hay nada que no lo tenga, dado que somos engreídos pero mortales. Y tampoco hay asunto alguno sobre la faz del orbe que no pueda hacernos solidariamente llorar, dado que sufrimos con un egoísmo que no se siente egoísta, cada pequeña bagatela adversa, que el papel del caramelo tarde en despegarse por ejemplo.
Pero bueno, vos sabés de esto más que yo...




El Melinda-Melinda Challenge que me lanzó un amigo escritor consiste en presentar la misma historia para hacer llorar y para hacer reír. Me dice que suena fácil en la teoría y en la práctica es imposible.

Ayudame a demostrarle que está equivocado.
Resulta que me habían colgado de las patas porque profetizaron que iba a matar a mi viejo. Me adoptan y una vuelta ma baitea un viejo full meado mal. Real. Literal que lo maté. ¿Y no va que era mi progenitor? Ahí ya no la pude ni ver a mi crush, que es todo lo que está bien y lo daba todo pero resultó a la postre ser la madre que me dio a luz y yo dele que dele, poniéndosela sin complejos. Re. Me parece un montón.La esfinge me hizo una pregunta y cuando se la respondí me ghosteó.No me la container. Vine a acabar con la Yocasta. Y morí en mi ley.
Alejandro Pagés
Muy difícil. Caracterizando los personajes de manera muy ridícula y cambiando algunos detalles clave, podría hacerse de una tragedia una comedia muy negra y ácida, pero no dejaría de tener un toque trágico. Cambiar una comedia ligera en tragedia me parece más difícil todavía, más bien creo que se lograria algo sin gracia.... De pronto pienso en la película uruguaya Whisky, sería una buena base ..
Francisco Abelenda
Dicen los que saben que el recorrido de un psicoanálisis fundamentalmente consiste en eso, en pasar del registro de la tragedia al de la comedia. Desde ya que no debe ser fácil. Yo hace más de treinta años que voy yendo.
Francisco Abelenda
Lo que dice Alejandro Pagés me parece que puede ser clave porque justamente para que haya una buena comedia, esta debe tener un trasfondo trágico y una buena tragedia debe tener un trasfondo cómico.


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