La arqueología es un sedimento triste que se excava

"En mis tiempos mozos era casi imposible encontrar una revistilla que no trajera un poema de William Carlos Williams. Siempre lo leìa lentamente y lo releía tres o cuatro veces esperando encontrar algo de màs valor que prosa indiferenciada y cortada en versos, que a veces eran tan cortos que llegué a preguntarme si esas revistas pagaban la poesìa por pulgadas. Considerad, por ejemplo, los siguientes versos banales que he inventado para parodiar uno de los poemas màs admirados de Williams:
Your thighs are appletrees
whose blossoms touch the sky.
Which sky? The sky
where Watteau hung a lady's
slipper. Your knees
are a southern breeze-or
a gust of snow. Ahg! what
sort of man was Fragonard?
-as if that answered
anything
Comparad ahora mis toscos esfuerzos con este autèntico poema de Williams "The Red Wheelbarrow", que transcribo por completo.
so much can be
learned
from a brown
butterfly
drenched with rain
drops
beside the red wheel
barrow
¿Podeis, con toda honestidad, decir que encontrais alguna razòn por la que el poema de Williams tenga màs valor que mi parodia?. Puede que haya algo pero yo no lo encuentro. Quizà no haya nada. No lo sé. Està claro que por ahora pierdo la apuesta, pues la reputaciòn de Williams sigue siendo alta (...)p. 85-86 primera edición de Gardner, Martin, "Los porquès de un escriba filòsofo", Tusquets, Superinfimos 13, Capìtulo 4, LA BELLEZA: POR QUÈ NO SOY UN RELATIVISTA ESTÈTICO.
Vamos ahora a mi segundo invitado del dìa:
La rana y la eternidad
Tenìa yo màs o menos nueve años de edad cuando oì cierto viejo chiste, viejo ya entonces, que me pareciò sumamente còmico. Se le pregunta a un hombre si sabe tocar el violín.
-¿Y còmo quiere que sepa si sè-responde èl- si jamàs lo he intentado?
Recuerdo que durante mucho tiempo estuve intrigado por la posibilidad de que tambièn yo pudiera ser un virtuoso del violìn sin saberlo. Me parecìa que debìa probar, pero hasta ahora no lo he hecho.
Muchos de mis amigos japoneces, igual que los editores japoneces de mis libros, me dieron volùmenes de poesìa nipona, traducidos al inglès. Yo sabìa algo de poesìa japonesa y de sus reglas bàsicas, la frecuente alternaciòn de las cinco y siete sìlabas y algunos otros pequeños detalles, pero ahora que estaba leyendo màs de esas poesìas que nunca en mi vida, los poemas comenzaron a serme completamente familiares. Al poco tiempo no me fue posible resistir la tentaciòn de probar mi capacidad para esa rama de la literatura. Y fue asì que escribì un poema:
Estoy mirando a una rana
que me mira sonriente
las sonrisas de las ranas me recuerdan siempre
la Eternidad.
Como eso me pareciese sumamente alentador, escribì otro poemita, despuès de unos cuantos dìas de reflexiòn:
Estoy mirando una rana.
La rana me mira sonriente.
Las sonrisas de las ranas me recuerdan siempre
La Nieve.
¿y quièn puede criticarme por haber convertido esos dos poemitas en una trilogìa?:
Una rana me mira.
Yo la miro y le sonrìo.
Mi sonrisa siempre recuerda a las ranas
La Primavera y la Luna.
¡Oh, la luna!
Le enseñè mis poemitas a unos amigos japoneces y todos ellos declararon que eran soberbios, rayanos en lo grandioso. Me dijeron eso con tono tan convincente que durante algùn tiempo no estuve muy seguro de quièn se estaba burlando de quièn. Pero cuando mis tres poemitas fueron traducidos al japonès y publicados en una de las principales revistas de poesìa, me quedè pensativo.
No habìa tenido la menor idea de mi capacidad, simplemente porque jamàs habìa intentado escribir poesìa japonesa, como tampoco habìa intentado tocar el violìn. ¿Será posible-pregunto a mis lectores-que yo sea uno de los màs grandes poetas japoneses de nuestros tiempos ?
George Mikes, "El misterioso Oriente no es tan misterioso", Ed. Dèdalo, Buenos Aires, 1960
(no tengo la malicia suficiente como para no advertir una diablura de Martin Gardner, que invirtió su versión y la del poeta al que denosta)

Miterrand llega nervioso a ver a su analista...disculpe, tuve que darle la clave para desactivar los misiles que les vendimos a Argentina, porque Thatcher está dispuesta a tirar bombas nucleares por esas islitas de mierda...

Después de tantos diálogos
Intercambios
El telefónico ida y vuelta y el
estereofónico
afónico
afínico
definitorio
afinitorio
vaivén de tu figura esbelta
y tus idas y vueltas
llegaste a la puerta de casa y rompiste
el embrujo de nunca en la vida
habernos tocado
me agarró tu mano
el brazo
SOS REAL
sonreíste
Y desde entonces
Nos dimos incluso besos
Que ya no eran los que
mutuamente nos inspiramos
Besos que se ve que
teníamos guardados
reservados para mejor ocasión
almacenados y stockeados
por si el Apocalípsis
Besos que no habíamos llegado a hacer entrega efectiva
a la persona en su momento por la fugacidad altiva
Desde entonces nos queremos más incluso
De lo que nos queremos
Porque nos cuidamos y prodigamos mimos
Y para que los lacanianos no chillen, que nunca faltan
Nos damos carencias afectivas también
no negamos la falta


Comentario al reportaje de Cristina Pérez a Macri:
Estamos ante una situación similar a cuando Alberto era presidente y Cristina le aportó votos. Macri sale a denunciar que Karina oblitera cada posible acuerdo. Con sus divertidas capacidades de metáfora: -estoy más solo que Tom Hanks en "Náufrago".
Es interesante cómo analiza que Horacio Rodriguez Larreta sufrió un trauma al perder la interna contra alguien a quien considera intelectualmente inferior.
Es como cuando al oír que Fito decía que le daba asco el electorado porteño habló de una desoída patología y quiso ofrecerle ayuda y contención.
Muchos amigos me decían que Cristina era una fanática y Macri un cínico, pero veo muchísima más flexibilidad y hasta cinismo en Cristina que en Macri.
Macri es un talibán de un libre mercado en contra del Estado que resulta asombroso si uno sabe que toda la riqueza macrista emana del contratismo del Estado y el condonar la deuda del correo y muy atípicas derivas del libre mercado.
Macri llegó a la presidencia tras su éxito en Boca y el apoyo radical. Pasó por mejor mejor y más austero administrador que Cristina, que dejó a todas luces el país desendeudado, pero al mismo tiempo sin confianza internacional. Contrajo una deuda monstruosa. No logró casi nada, algunas casas para pobres bastante más dignas en la Chacarita de lo que se hubiera temido, bastante al estilo Evita de no darle a los pobres algo apenas mejor, sino algo realmente bueno.
Su presidencia fue tan mala que su mayor capital, el voto antik, recuperó fuerzas y lo derrotó, incluso con un operador de Clarín, golpeador, mujeriego absolutamente improvisado incapaz de gobernar su propio cuerpo


Voy caminando y me encuentro con un Isetta rosa. Me explican que es de la hija de Illia. Me pregunto si todos mis fans conocen la historia de este autito originalmente diseñado por los tanos y que BMW hizo en Alemania, hasta que Volkswagen con su escarabajo los obligó a desistir por la competencia del auto barato...Debido a su peculiar forma de huevo y sus ventanas de burbuja, adquirió el apodo del coche-pompa. En otros países fue «Das rollende Ei» (huevo con ruedas) o «Sargwagen» (tumba sobre ruedas) en Alemania; «pot de yaourt» (tarro de yogur) en Francia; «bola de futebol de fenemê» (pelota de fútbol de camión) en Brasil (FNM son las iniciales de una marca de camiones brasileña); y en Uruguay y Chile todavía es conocido como el «huevito». En Argentina se lo conoce como «ratón». Por su forma y porque hay que ser medio ratón para comprar ese pseudoauto...


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